¿Cómo retardo el envejecimiento?
Si ya te comenzaron a salir las primeras arrugas o ya tienes algunas cuantas, apostarías que destinas una suma importante de dinero para comprar productos para combatir el envejecimiento. Y eso no está mal, la que puede puede, dicen por ahí, el tema es que cuando se trata de arrugas o líneas de expresión, lo mejor es prevenir.
¿Y cómo lo logramos? Para lucir una piel lozana y fresca –sin que nos desfinanciemos cada mes- debemos seguir ciertos rituales de belleza que a continuación comparto contigo:
Usa protector solar. ¿Sabías que el 50% de las arrugas que tenemos son derivadas de la exposición al sol? Para retrasar el daño y el envejecimiento generados por el delicioso sol, porque a todas nos encanta o no? Es importantísimo que nos apliquemos durante las mañanas protector solar con factor 30, y repitamos la operación en la tarde, durante todo el año.
Hidrátate. Seguramente ya sabes que nuestro cuerpo está constituido por un 80% de agua y cuando existe deshidratación a nivel cutáneo, disminuye la elasticidad y las arrugas se acentúan. Por eso, es fundamental tomar agua y usar productos hidratantes. El consumo recomendado es de ocho vasos al día, sobre todo en época de verano, cuando por las altas temperaturas aumenta la sudoración.
Tampoco debemos olvidar de humectar nuestra piel con productos cosméticos tanto en las mañana como durante la noche.
Evita fumar. Si posees este mal hábito, nada qué hacer. Sólo te recomiendo que al menos disminuyas la cantidad de cigarrillos que fumas al día porque la nicotina acelera el envejecimiento cutáneo, tanto así, que la piel de un fumador se nota a simple vista (luce más reseca y delgada de lo normal).
Obvio, dieta equilibrada. Lo ideal, y en la medida de tus posibilidades, incluye todos los elementos nutritivos necesarios para disfrutar de buena salud y, al mismo tiempo, retrasar la aparición o avance de los signos de envejecimiento.
Limpieza. Debemos incorporar el hábito de limpiar nuestra piel, especialmente por la noche, por más cansadas que lleguemos.
Tener buen ánimo. Aunque no lo creas, existen investigaciones que demuestran que el estrés incrementa la producción de cortisol, ¿qué significa esto te preguntarás? Bueno, el cortisol daña la habilidad de la piel para la retención del agua y, además, disminuye la luminosidad de ésta. Además, aumenta los niveles de azúcares de la sangre y es capaz de dañar el colágeno y la elastina. Increíble, pero cierto.
Dormir ocho horas diarias. Te apuesto a que no te habías enterado que todos los procesos regenerativos del organismo necesitan de un descanso adecuado, es decir, necesitamos tener un buen dormir y eso requiere de 8 horas diarias.
Al dormir, se relajan nuestros músculos, favoreciendo la firmeza y elasticidad de nuestra piel. Así que ya sabes, menos carrete y más descanso.
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